ENTRE COFRADES COMPLUTENSES (MARZO DE 2014)

ENTRE COFRADES COMPLUTENSES (MARZO DE 2014)

Entrevista a Rafael Martín Hernández, el corazón de un imaginero

ENTRE COFRADES COMPLUTENSES (MARZO DE 2014)
 https://entrecofradescomplutenses.blogspot.com.es/2015/03/entrevista-rafael-martin-hernandez-el.html
 
 
 
Boceto tamaño 1:2 de Nuestro Padre
Jesús Despojado de sus vestiduras, 
de Rafael Martín Hernández


   En la tarde del pasado sábado, tras la presentación al pueblo cofrade complutense del boceto del futuro Jesús Despojado, su imaginero, D. Rafael Martín Hernández concedió una entrevista a este medio en la que contestó abiertamente a todo lo que se le preguntó y demostró que a parte de ser un grandísimo artista, es ese tipo de personas que debería abundar en todos los sitios, alguien que verdaderamente siente la Semana Santa y su significado. 

1. ¿Por qué imaginero? ¿Lo tuyo fue vocación innata, o llegaste al arte de plasmar a Dios por otros caminos?
 
     Desde mi infancia solía hacer pasos en miniatura, pero llegó el momento en el que decidí hacer yo mismo las imágenes. Entonces, mi madre que vio que tenía una especie de don para esto, conoció de la forma más casual a una persona conocida de mi maestro, así que un día visitamos su taller, y me acogió para enseñarme el trabajo de la imaginería. Esto fue en el año 1996.
 
2. Tus comienzos son de la mano de D. Antonio Dubé de Luque, y su hijo, D. Antonio Jesús Dubé, ¿Qué huella han dejado estos maestros en tu técnica artística?
 
   Toda la base de mi técnica está soportada sobre las enseñanzas de mi maestro, y yo luego, a partir de ahí, he ido modificando ciertas características para no repetir su modelo, pues sería absurdo porque ya están ellos. Para ello, yo tengo que aportar mi carrera a la técnica escultórica, y seguir investigando para encontrar nuevos caminos expresivos.
 
     
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
3. Hace aproximadamente 20 años que empezaste en esto, y desde entonces has ido creando un estilo muy propio que te caracteriza y te diferencia. ¿Cómo describirías este estilo?
 
     Mi estilo se caracteriza básicamente por la búsqueda de la expresividad y el naturalismo. La expresividad tanto en el lenguaje corporal como en la expresión facial, pero siempre sin llegar a estridencias, de una forma muy mesurada para que conecte mejor con los fieles.
 
4. ¿Cuáles son los temas escultóricos que te gustaría abordar a lo largo de tu carrera y que hasta ahora no los has podido tratar?
 
     Me encantan los conjuntos escultóricos, no me importa que sea un descendimiento o un traslado al sepulcro, por ejemplo, que son unas escenas muy sugerentes. Estas composiciones de varias figuras requieren un gran trabajo de conexión entre unas y otras, de su lenguaje corporal y su expresividad, que es lo que me más me atrae de estas obras. También me gustaría trabajar en algún conjunto monumental para la calle, estaría encantado.
 

5. ¿Cuál es tu devoción? (No de una obra tuya, sino tu fe)

     La Imagen que más me impacta es el Cachorro, de Sevilla. Desde muy pequeño me impresionó muchísimo, y hoy, cuando le veo en la calle más aún, por su expresión en la que Ruíz Gijón plasmó el lapso entre la vida y la muerte. Es una obra muy completa, el punto álgido del barroco sevillano, y a partir de ahí ya no ha vuelto a crearse una imagen como ese crucificado. 
 
Santísimo Cristo de la Expiración
"El Cachorro", Sevilla.

6. ¿Con qué momento de tu carrera artística te quedas?

     Con cada entrega de una obra, aunque hay tantos momentos... como la soledad del taller, o cuando recibes los reconocimientos de las hermandades y ves la felicidad de las personas que reciben tus obras. Es un trabajo muy duro, durísimo, pero compensa tanto, que se olvida todo lo que has sufrido para llegar a ese punto. 

7. ¿Cómo es el proceso de creación de una Imagen, desde que se firma el contrato, hasta que sale por la puerta de tu taller?
 
     El proceso de creación comienza pensando muchísimo. En primer lugar debes haber visto muchas obras de arte e investigar nuevos caminos para aportar novedades y no repetir modelos. Siempre intento convencer a las hermandades de que no tiren por caminos que ya están hechos, aunque es muy difícil, porque romper esquemas en la imaginería es algo muy complicado.  Las hermandades ya han visto unos prototipos y quieren algo parecido a ellos. No obstante, nadie me ha cortado las alas mucho, siempre he tenido bastante libertad, y yo también la he buscado, para que una vez que tenga decidida la iconografía que voy a representar analice lo que quiero expresar y decir a través de esa obra y qué lenguaje plástico es el que debo utilizar. Realizo entonces unos dibujos para ver su composición y la forma de encajarla, y de ahí ya paso a un modelo pequeño para ver cómo funciona la figura de forma tridimensional. Finalmente, realizo la obra a la mitad del tamaño para estudiarla más pormenorizadamente. Cuando ya tengo la figura modelada hago un boceto real de la cabeza, y de ahí ya paso a madera. La madera se talla, se trabaja, se lija, y se hace una serie de preparaciones para culminar con la policromía al óleo. 
   Generalmente no utilizo modelos para que no me coarte tanto el naturalismo, me gusta trabajar de mi pensamiento y sentirme más libre. 
 
8. ¿Con qué compañero imaginero te quitas el sombrero?
 
   Va a sonar muy tópico, quizás en Andalucía no porque a veces puede resultar desconocido, pero es Gregorio Fernández. He tenido la suerte de viajar a Castilla, sobre todo a Valladolid, donde tengo una obra en la Iglesia de la Vera Cruz, que es el lugar en el que Gregorio tiene la mayoría de sus imágenes, por lo que he podido conocer de primera mano sus obras. Siempre me ha encantado la expresión y la espiritualidad de este imaginero. Era muy religioso, y eso se nota en su obra.
   Por otra parte, me encantan Castillo, Juan de Mesa, Montañés, Pedro Roldán... me quito el sombrero con tantos porque han aportado tanto que no puedo quedarme con ninguno obviando a otros.
   No dejo de lado ninguna escuela, no me centro solo en la andaluza, tanto la castellana como la levantina tienen sus maestros, y de todos hay que aprender. 
 
Cristo Yacente de Gregorio Fernández, 1634

  9. Un tema que está en el candelero en los últimos meses es el de las restauraciones: mucha gente rechaza la restauración de una Imagen al recuperarse su policromía original o ver su tez más clara al estar limpia. 

Tú, que también te dedicas a este ámbito de las restauraciones, ¿Cómo afrontas la restauración de una imagen?
 
     Pienso que se han cometido muchos errores en cuanto a las restauraciones de las obras, porque la gente no entiende que una Imagen es una creación de un autor que con el paso del tiempo gana en historicidad, dado que la huella del tiempo le va aportando valor. Si remodelas una obra ya está perdiendo la característica de su autor, pero es que además estás borrando la huella de la historia, por lo que le restas más valor aún. 
Por eso, cuando una hermandad me viene con una imagen que no les gusta estéticamente y que quieren repolicromarla para darle un aspecto más bonito, yo me niego rotundamente, porque se debe respetar al autor que la creó con una serie de características, y a mí, personalmente, no me gustaría que llegaran en el futuro y por las modas cambiaran mis obras. 
   Por eso, propongo eliminar todo aquello que se le ha añadido, aquello que desvirtúa visualmente la obra y le resta valor, pero sin borrar la pátina del tiempo. Debe haber un equilibrio entre respetar esta pátina del tiempo, y la estética del autor.
   A mí, por ejemplo, me llegó una imagen de la Virgen que tenía un gran desprendimiento en la nariz, maquillaje, repintes, etc. Así que lo que hice fue eliminar todos esos añadidos y reintegrar la forma perdida, pero no lijar la obra y policromarla de nuevo. A lo mejor, la Virgen hubiera quedado con un tono más sonrosado, más moreno, más a gusto actual, pero quizás dentro de unos años las obras con características antiguas tengan más valor que las de características contemporáneas, por eso estarías privando a quien la descubra en el futuro de que contemple la obra tal y como salió de las manos de su autor. 
   En resumen, preferiría que las obras no se remodelaran, y se respetara tanto el trabajo de su autor como la huella que el tiempo ha dejado sobre ella.  
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
10. ¿Qué opinas del arte sacro de nuestros días en cuanto a imaginería se refiere?
     
 
   Este es un tema muy complicado. Por un lado, veo que quizás muchas hermandades dirigen más su pensamiento en la hora de elegir a un imaginero por temas económicos, o por amistades, pero que hay poca discriminación en cuanto a calidad. A las iglesias llegan imágenes que no tienen la categoría de ser una obra que representen a Cristo y a la Virgen. Esto es algo que está haciendo mucho daño al gremio. 
Por otra parte, algo que perjudica mucho es la existencia de autores que prácticamente "regalan" sus obras, despojando del valor económico que la obra merece, pues lleva mucho estudio y dedicación, lo cual, también hace gran daño a la imaginería.
   También la veo un poco anclada en la repetición de lo pasado, con las esculturas del siglo diecisiete, dieciocho y diecinueve, estéticas rodalnescas, o el estilo conventual, algo que no entiendo, dado que estamos en el siglo XXI y volver a repetir los mismos modelos lo veo un poco absurdo. Pero es lo que piden las hermandades, que quieren tener una imagen que las retrotraiga a esos períodos. Pienso que se puede tener una estética dieciochesca sin ser necesario calcar una obra de ese siglo, sino plasmar sus características pero actualizada.
 
11. Eres conocido en nuestra ciudad por tus obras como Nuestra Señora de la Misericordia, considerada una de las mejores Vírgenes de su año, el nacimiento de Jesús del convento de las Claras, y ahora este nuevo proyecto del sueño despojado. Además, viviste de cerca el Primer Salón Cofrade. ¿Qué opinas de Alcalá, y de su Semana Santa?
 
     De Alcalá no puedo decir más que maravillas, porque es una ciudad impresionante: la gente de aquí estupenda, siempre he estado encantado de venir porque me han tratado como a uno más de su familia, así que no puedo reprocharles nada a los alcalaínos, ni mucho menos. Solo tengo palabras bonitas que me salen del corazón. 
   Sin embargo, me da mucha pena ver que las hermandades de aquí no están unidas. Me duele muchísimo ver que se intenta tirar por tierra el trabajo ajeno, en vez de apoyarlo. Tampoco apruebo que se vean mal cosas como pertenecer a dos hermandades, algo que es totalmente normal no solo en Andalucía, sino en otras provincias en las que estoy trabajando como en Cáceres o Valladolid, y he de decir, que lo que he visto aquí, no lo he visto en ningún sitio.
 
Nuestra Señora de la Misericordia
Alcalá de Henares

   Es algo que me da muchísima pena, porque pienso que si las hermandades no se unen, pueden destrozar la Semana Santa. La gente debe ver que las hermandades tienen unos valores como la fraternidad que son los que se quieren llevar a la calle con una procesión, o con unos cultos internos. Pero no se pueden tirar por tierra ni olvidar esos valores cuando se refieren a otra hermandad, porque eso sería ir totalmente en contra de lo que representa la Semana Santa y sus hermandades. Con esto no quiero generalizar, pero sí hay algunos casos que me tocan de cerca en los que están pasando cosas muy tristes, como que mi Virgen no salga en procesión este año. Son temas personales los que hacen que una hermandad no salga a la calle, por lo cual están privando a los devotos de tener la oportunidad de ver a su Virgen y a su Cristo por las calles de Alcalá. Y esto es algo muy triste sobre lo que deberían reflexionar las cofradías.

12. Son momentos difíciles los que vivimos los cofrades complutenses, a base de mucho trabajar conseguimos hacer que nuestra Semana Santa progrese, pero también vemos cómo algunas de las hermandades de nuestro entorno se están viendo azotadas por malas rachas. ¿Qué consejo darías a todos los cofrades de nuestra ciudad?
 
     Que vivieran más profundamente los valores que transmiten las imágenes a las que les rezan, y existiera mayor fraternidad entre las cofradías. Que no se tiraran piedras las unas a las otras ni entre los hermanos. Que participaran mutuamente en los actos de todas las hermandades, y miraran más su trabajo y se preocuparan menos de compararse con las demás. 
   Pienso que una Semana Santa no se sostiene con una hermandad, por muy grande que sea, tiene que haber más hermandades. Y si estas hermandades no están unidas para luchar en un mismo camino, la Semana Santa desde fuera será vista como un espectáculo sin contenido y en el que la gente está peleada.
 
13. ¿Te gustaría ver a Nuestra Señora de la Misericordia algún día frente a su hijo Despojado? Como por ejemplo, en un encuentro durante la futura Estación de Penitencia de esta Pro-Hermandad.
 
     Me haría muchísima ilusión, y si se diera esa circunstancia vendría a Alcalá a verlo. Lo veo difícil porque son barrios alejados y habría diferencia en los días, pero me haría mucha ilusión ver eso. 
 

14. ¿Cómo es el trato y la relación con los jóvenes de Despojado?

     Fantástica, sobre todo, con mucho respeto. Veo mucha madurez, y es algo que me ha sorprendido viniendo de gente tan joven, yo soy muy desconfiado cuando me llega un encargo, porque ya me he encontrado muchas papeletas de cofradías en las que me he visto en proyectos que han subido como la espuma y de igual manera han bajado porque no había nada sólido que los sostenía, y tras hacer bocetos y proyectos se han quedado en nada, no por mí, sino porque el grupo se ha disuelto directamente, me ha pasado en Cádiz, e incluso en Alcalá. 
   Por eso, me sorprendió, y fui con paso tranquilo y tras analizar la situación he visto a gente muy válida, gente que viene de otras cofradías que ya conocía, o gente como Roberto, que le he conocido este año y con el que tengo un contacto muy estrecho vía teléfono. 
He encontrado muchísimo respeto hacia mi trabajo por parte de estas personas maravillosas, pero el problema llega cuando sucede lo que anteriormente he dicho. 
 
15. En Cádiz, tu tierra natal, se venera la Imagen de Jesús del Amor al ser despojado de sus vestiduras, obra del gran maestro D. Francisco Romero Zafra. ¿Ese es el estilo que seguirá el futuro titular de esta Pro-Hermandad y que nacerá de tus manos?
     No, la verdad es que no es el estilo que le quiero dar a la imagen. Cada autor tiene su lenguaje y él tiene uno con unos planteamientos determinados y yo otros. Además, yo no quiero repetir modelos. Ya veréis en Alcalá qué es lo que yo os quiero proponer con esta imagen que no hayáis visto en otro Despojado. 
 
16. Cuéntanos, ¿Cómo está siendo la creación de Nuestro Padre Jesús Despojado de sus vestiduras? ¿Qué pretendes reflejar en él?
     
 
   Está siendo un proyecto muy ilusionante. Me encanta el proyecto y cómo me lo han planteado, la libertad que me han dado al no decirme unas características que tenga que tener el Cristo, salvo que sea una imagen más o menos frontal. Yo les estuve proponiendo ideas y a ellos les fueron pareciendo bien, por lo cual, me siento muy cómodo, que es algo muy importante.
   Estoy muy ilusionado con el proyecto porque con él quiero dar una vuelta de tuerca a lo que simboliza la advocación de Jesús Despojado, que es la entrega y el sacrificio, tras ser despojado de su estatus social, la nobleza, que es lo que la ropa simboliza. 
   Quiero representar a un Cristo que no huye del Gólgota, sino que da un paso hacia delante porque él afronta la redención y eso conlleva el sufrimiento de la cruz. A la vez, la mirada va dirigida a los fieles y conectará con ellos con amor y sin sentimientos excesivos de su rostro. Con sus brazos abiertos mostrará cómo se entrega al sacrificio. 
   Es una metáfora de cómo tiene que ser la vida, bajo mi punto de vista: la vida nos la encontramos con muchísimas circunstancias de sufrimiento, y debemos afrontarla con fortaleza. 
   Esto es lo que yo les plantee y a ellos le encantó, así que traeremos ese mensaje a Alcalá.
 
17. ¿Cuándo podremos venerarlo en nuestra ciudad?
     
 
   Esa respuesta no te la puedo dar porque depende de muchos factores. Es una pro-hermandad joven con pocos medios económicos, y a su vez, es una obra que por sus características supone un desembolso. Es un Cristo totalmente anatomizado con un escueto paño de pureza, por lo que necesito un tiempo, y a pesar de que tengo otros proyectos, podría terminarlo para la próxima Cuaresma. Sin embargo, es algo que depende mucho de lo que la gente quiera ayudar, y las actividades que realice la pro-hermandad para recaudar fondos. 
 
18.  Muchas gracias querido Rafael Martín por el tiempo y las palabras que nos has dedicado en esta tarde, y sobre todo, por participar en el progreso de Alcalá con la obra que está naciendo en tu taller. Te esperamos ver muy pronto de nuevo en nuestra ciudad, y que en la próxima Cuaresma este sueño que hoy se ha presentado a escala sea ya realidad. 
 
     Muchas gracias a vosotros, por haber venido y por esta entrevista.